1ra parte: La Arquitectura y la economía tienen ambas una conexión de correspondencia mutua; es básicamente una relación entre la utilidad proporcionada y el capital invertido o gastado en una obra.
La economía nos plantea, que, a mayor capacidad de habitabilidad, mayor es la rentabilidad; o sea, mientras más construyo, tengo la posibilidad de vender más.
Sin embargo, esto tácitamente crea ciudades hormiga, con sobrepoblación, sin criterio de diseño y poco respeto al ser humano como persona individual, el usuario se convierte en un número.
La ‘Prosperidad Económica’ se refleja en la arquitectura, Sin embargo, la construcción y la arquitectura denotan en sus edificaciones el auge o declive de una economía, pero además la arquitectura puede ser un motor de la propia economía, que se manifiesta en todos los niveles económicos, tanto si hablamos de microeconomía como de macroeconomía.
El diseño también influye claramente en la economía; Los diseñadores solucionan problemas cómo el uso y aprovechamiento racional del espacio, así como el comportamiento y la percepción que tienen los clientes hacia una determinada edificación.
Solamente con modificar el diseño de la imagen de un edificio que estaba anticuado, obsoleto o deteriorado, con su remodelación, cambia a su vez el valor de la propiedad y por lo tanto la oferta / demanda del usuario consumidor y podemos atraer su interés hacia la compra o renta del edificio, revalorando al mismo.
La arquitectura en la actualidad enfrenta muchos problemas que tienen que ver con la Economía. Algunos de estos son:
- La creación de Vivienda a gran escala y a bajo costo
- La Reconstrucción de la infraestructura urbana y Servicios básicos
- La búsqueda de Diseños más inclusivos - La preservación del patrimonio cultural de las edificaciones antiguas y protegidas
- La Reducción de la contaminación en los procesos constructivos, así como de la producción a gran escala de los gases que provocan el ‘efecto invernadero’ y el cambio climático
Para atacar estos problemas, debe apoyarse con recursos financieros que proporciona una Economía sana.
Arquitectura y Economía, ambas son dos Conceptos ligados en todos los Niveles, no podemos entender el "Uno sin hablar del Otro".
Podemos aseverar con certeza:
Que la economía es a la arquitectura lo que arquitectura es a la economía.
Para llegar a esta definición debemos de tener claro, una serie de ideas previas que son las que vamos a analizar en este artículo, para así entender mejor, la íntima relación entre la economía y la arquitectura; solo así comprenderemos que tanto una como la otra no tienen sentido de ser por si solas, siempre van de la mano.
Si bien la arquitectura es como un todo, que incluye proyectos, obras, construcción, urbanización, servicios, comunicaciones, rehabilitación, patrimonio inmobiliario, propiedades, inversiones de inmuebles, ingeniería aplicada, ahorro energético, tecnología sustentable, entre otros.
También debe allegarse de recursos económicos y trabajar interdisciplinariamente con la economía. Por lo tanto, cuando pensamos invertir en Arquitectura, nos referimos en actuar en todas o en la mayoría de esas áreas.
La construcción es una Actividad Económica del sector secundario, relacionada con la transformación de la materia prima en productos elaborados o semielaborados para utilizar las obras de Edificaciones. Las diferentes ramas de este sector son la industria de materiales, enseres y acabados para la construcción y la fabricación de accesorios relacionados con él.
Sin embargo, el objeto de estudio principal de la economía reside en la distribución y administración de los recursos limitados en la sociedad. Estos productos pueden partes de un todo o bien el resultado integral completo y terminado. La importancia de la economía como parte integral de las Obras Arquitectónicas, está primordialmente relacionada con la obtención, financiamiento y administración de los recursos económicos para realizar las obras.
Desde el cálculo de los presupuestos y manejo de las compras y los gastos, hasta cuestiones paralelas como los permisos, autorizaciones, impuestos, amortización de la inflación, el interés, la riqueza, la desigualdad, los mercados emergentes, la energía y el medioambiente.
También por otro lado, existe la “arquitectura económica”, que funciona, por lo general, utilizando materiales sustentables locales, como los que son regionales a la zona, madera, arcilla, piedra o tierra de manufactura artesanal. Al ser originarios de la naturaleza, estos elementos permiten que sea más barata la construcción, además de ser más amigable con el medio ambiente y el contexto; incluyendo una mano de obra local, que es más accesible y barata.
He tenido la oportunidad de constatar a lo largo de mi trayectoria profesional, que cuando un proyecto no está pensado en términos financieros y económicos, para ser ejecutado como una obra factible, termina por no ser viable y tarde o temprano está destinada al fracaso.
Se debe de tener la certeza de que se cuenta con los recursos económicos para llevarse a feliz término en forma integral con todas sus variables, se debe de administrar correctamente y realizar en un tiempo adecuado, porque el tiempo cuenta mucho y el factor económico es variable y susceptible a cambios.
Así mismo, he visto hacer fortunas con proyectos de obras bien ideadas y ejecutadas; como también he visto caer Emporios con obras mal pensadas y/o administraciones deficientes que llevan a la ruina.
Teatro/Auditorio Municipal
Edificio de Gobierno y Centro de Reclusión
Biblioteca Centro Educativo
Casa Residencial
Vivienda en Conjunto Horizontal
Casa de Interés Medio
Artículo 2da parte: DEFICIT HABITACIONAL
-Un reto para que la Arquitectura y la Economía trabajen juntos
Tener una vivienda propia es un problema para diversas generaciones, pero sobre todo para los jóvenes. Existe una clara problemática en el panorama de adquisición de vivienda para la gente joven, que obstaculiza y dificulta el poder tener acceso a una vivienda digna en México (y en general en los países Latinoamericanos). Y esto no solo se debe a la falta de interés, ya que la mayoría de la gente busca un hogar estable, pero gran parte de ellos lo hacen por la vía del arrendamiento.
En la CDMX, las rentas de departamentos se han incrementado estrepitosamente debido a que cada vez con más frecuencia a muchos extranjeros (que trabajan a distancia vía Internet), se les hace muy económico e interesante vivir en la Metrópoli por un corto periodo de tiempo. Según varios estudios al respecto, hay varios factores que dificultan que las personas tengan un hogar.
“Tener una vivienda en México se ha convertido en un desafío para diversas generaciones.”
Los jóvenes entre 20 y 40 años rentan vivienda, porque no ganan suficiente dinero para comprarla y además sufren una gran dificultad para conseguir un crédito y no cumplen los requisitos necesarios o el historial crediticio requerido. De los 57 millones de personas que trabajan una cuarta parte de la fuerza laboral son jóvenes; Ya que la mayoría no tiene sueldos fijos, son de ingresos variable y eso les impide comprometerse a un crédito. Muchos trabajan en el sector informal o como “free-lancers” y no pueden acceder a apoyos gubernamentales.
Después de una breve y somera investigación;
Se puede identificar que, para erradicar el déficit habitacional en México, se requeriría generar la construcción de un promedio de 800 mil unidades de vivienda por año; así como aumentar notoriamente la inversión en construcción y sobre todo enfrentar el fenómeno de la vivienda informal y la desmedida auto construcción. Somos una sociedad con 54 millones de pobres y la gran mayoría de ellos viven hacinados y no son dueños de una propiedad.
Primeramente, para contribuir a los procesos de desarrollo de políticas públicas del sector vivienda en México, se debe sumergirse en el problema.
Durante muchos años se ha sufrido históricamente de un déficit de vivienda cualitativo y cuantitativo; O sea, proporcionar viviendas que requieren mejoras para estar en los estándares mínimos de habitabilidad y dotación de servicios; así como el requerimiento de más cantidad de oferta de casas y departamentos disponibles y accesibles. La capacidad productiva de vivienda no logra satisfacer el requerimiento habitacional.
Casi en todos los sectores se produce más de lo que se puede consumir, no así en la vivienda; siempre está escasa; Hay más gente necesitando un hogar, que profesionistas construyendo un producto terminado y accesible. Gran parte del problema se debe al escaso crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y a la volatilidad económica.
O sea, que la inflación va creciendo más rápido que la capacidad para poder ahorrar y hacerse de un capital que permita la adquisición. Y esto se ha dado en los últimos años por un crecimiento económico relativamente lento, combinado con el desempleo, subempleo, y una elevada desigualdad de ingresos; así como el incremento constante de precios de los insumos y materiales de construcción; que han hecho que una parte importante de la población tenga dificultades para adquirir una vivienda formal y de calidad”.
Para lograr ese objetivo:
-Hay que permitir el ágil acceso a los productos bancarios y a los créditos entre los segmentos de trabajadores formales e informales y también para la población de escasos recursos.
-También hay que procurar que los Mercados Financieros mantengan la estabilidad económica y así proteger los derechos de las entidades crediticias fomentando la inversión y la competencia.
Los aspectos críticos primordiales para atacar y combatir, para la futura evolución de un mercado nacional de vivienda son:
* Apoyar desarrollos y proyectos habitacionales, reduciéndose los trámites y la gestoría
* Conservar un bajo crecimiento de los costos de construcción y mantenerlos por encima de la inflación
* Promover la fusión de créditos con la incorporación de varios miembros de una familia, para compartir un mismo hogar
* Revertir el déficit cuantitativo actual, generando más oferta de vivienda
* Proporcionar créditos con interés preferencial para la vivienda a una tasa más baja
* Incrementar la relación: densidad de suelo, -construcción-superficie, permitiendo un mejor aprovechamiento
* Proponer programas de desarrollo multifamiliar incorporando zonas verdes y servicios de infraestructura adecuados
* Fomentar la educación financiera en las nuevas y futuras generaciones.
Por lo tanto, el principal reto para acabar el déficit habitacional en México sería combatir la informalidad laboral. Para que la clase trabajadora pueda tener acceso a créditos aplicables a la vivienda. Y agilizar la aprobación de proyectos y obras de inversionistas, controlando la engorrosa tramitología y eliminando la corrupción que actualmente opera y obstaculiza los permisos.
A pesar de ser una sociedad más productiva en el trabajo, la distribución de valores está peor que nunca. Es preciso salir de la pobreza emergiendo con aspiración a una clase media; que actualmente es más bien una “media clase”.
La propuesta para combatir este problema y garantizar el derecho a una vivienda digna; sería otorgar créditos bajos y con facilidades y flexibilizar los créditos a particulares; proporcionar Incentivos fiscales a este sector y mejorar los sueldos; combatir el trabajo informal e impulsar cooperativas de viviendas para agrupar y asociar interesados en soluciones de espacios habitacionales multifamiliares. Los inversionistas habitacionales, están más interesados en recuperar la inversión generando una ganancia o utilidad importante, que en dotar de un servicio de habitación a precio adecuado.
Por eso es preciso que el sector gubernamental tome las riendas en este tema, adecuando las políticas públicas a favor de dignificar y posibilitar la vivienda. Y también se debe activar una regulación a los sistemas de arrendamiento por aplicación para extranjeros, que recientemente han incrementado los precios de renta de departamentos en la CDMX. En resumen, hay que procurar crear un mejor ‘Horizonte colaborativo entre gobierno, inversionistas y usuarios, para fomentar la construcción de un futuro para esta sociedad.
Edificio Residencial de Lujo
Edificio Residencial Exclusivo
Edificio de Departamentos en Zona Turística
Edificio Habitacional de Interés Medio
Edificio de Arrendamiento Temporal por Aplicación
Edificio Uso Mixto
Edificio Habitacional de Interés Social
Edificio Habotacional de Interés Medio
Acerca del Autor:
Graduado en la Universidad Autónoma Metropolitana 1977-1981. Realizó estudios de Postgrado y varios cursos de actualización en diversas áreas, Gerente de proyectos en Legorreta Arquitectos; Técnico especialista en Construcciones Escolares para CONESCAL / UNESCO y OEA; Director de Proyectos en una firma especializada en hotelería, centros de consumo y Diseño de Interiores.
Es Socio Fundador de ECLIPSE ARQUITECTOS y director de la misma firma encargado de Diseño de Proyectos y Realización de Obras Arquitectónicas y de Interiores.
Cuenta con participación en proyectos de Hotelería, Centros Educativos y Culturales, Diseño de Interiores, Arquitectura de paisaje, Diseño de Mobiliario, Imagen Corporativa, Diseño de Escenografía, etc. Miembro de CAM-SAM. Y además ha diseñado y construido más de 300 Centros de Consumo.
Ha tenido labor docente como profesor e investigador en la "UAM " durante 9 años y fue catedrático de Taller de Diseño Arquitectónico en la Universidad Anáhuac del Sur por otros 9 años. Coautor del libro "Recomendaciones de diseño para Escuelas de Arte".
Es autor de tres libros: “Las raíces perdidas”. novela histórica familiar ilustrada; “Diseño de Proyecto de Centro de Artes de Michoacán”, y también de “Detrás de la Pluma” pensamientos, dibujos y poemas.
Ha escrito ensayos y artículos para varias revistas del ámbito del diseño y la construcción. Algunas de sus obras han sido publicadas en libros, catálogos, reseñas y revistas del ramo de México y Estados Unidos.
A la fecha, la firma ha diseñado más de 400 proyectos ejecutivos y ha construido más de 300 obras localizadas en diversas Ciudades de todo el Territorio Nacional e inclusive algunas en el extranjero.